VOLVER A EMPEZAR

NOTA EDITORIAL:
Por momentos uno puede detenerse a pensar por qué se disputa un torneo de fútbol entre compañeros o amigos...y a las conclusiones que puede arribar son varias; descargarse de las tensiones que la vida nos impone de lunes a viernes, pasar buenos momentos con gente querida, o bien por el simple hecho de conseguir un título. Sea cual fuere el motivo, desde mi punto de vista tiene mucho más valor apostar a lo grande y morir en el intento a conformarse con algo efímero que poco aporta a la historia de un equipo, algo de lo cual difícilmente uno pueda estar orgulloso en el futuro y recordarlo con algarabía. Es por eso que Candomberos desde que se juntó por primera vez para disputar la categoría B de la Copa Interchannel ha apostado a lo mismo, salir a ganar en todas las canchas, independientemente de quien sea el rival. Ha sufrido reveses, ha perdido títulos, es cierto; pero la misma actitud es aquella que le permitió obtener todos los logros que el conjunto rosa supo cosechar y haber pasado más momentos positivos que negativos en sus 3 años de existencia. En fin, cuando uno observa a lo largo de distintas categorías diversas actitudes ante un simple partido de fútbol, que puesto en el contexto de la vida diaria no es más que un divertimento, se genera inmediatamente la pregunta trascendental de "¿Por qué jugar?, para "no perder"? En fin, y como reza una célebre frase, "La historia no la escriben los cobardes".


Por la fecha número 12 del Torneo Clausura Candomberos debía enfrentar a Manzi F.C, quien en el pasado había sabido consagrarse campeón de la categoría C.
El rosa con la ausencia de Seba Lamarque y de Gus Alvarez (quien no participa más del equipo), el retorno de Eze Miño y la invitación especial de Agustín Belusci.
El Candombe no tuvo un gran partido, empató y dejó pasar un importante tren de cara a mantener un punto de ventaja ante Napoli (quien con su triunfo ante Recovecos alcanzó también el primer lugar).
Mucho no hay que decir acerca del partido; un equipo claramente con ganas de ganar (Candomberos) y otro con intenciones de no perder (Manzi). Si bien es cierto que el rosa comenzó metido y abrió la cuenta con un fuerte zapatazo de Ale Pereyra (quien sin lugar a dudas está siendo lo mejor del campéon de la C en las últimas jornadas), posteriormente padeció de desconcentraciones que permitieron al equipo verde irse al descanso 2-1 arriba.
En el complemento el rosa salió a matar o morir y puso a Manzi contra las cuerdas. Sin delanteros, el equipo que yace en las últimas colocaciones del torneo se instaló muy cerca de su área y se abocó a proteger el resultado. El Candombe probó de todos lados, pero entre los palos, las atajadas del arquero rival y la mala definición por momentos, hacían que se llegara al minuto 14 en desventaja. Afortunadamente Tucho volvió al gol tras 2 fechas en el momento oportuno, e igualó. De allí en más, a pesar del empuje de Ale, Sica y El Flaco Miño, no se pudo romper la igualada y el resultado fue un 2-2 que declara el segundo empate consecutivo del rosa.
Con esta igualada, el torneo empieza de 0. Con las mismas unidades que Napoli, el Candombe deberá levantar la guardia a tiempo, ya que ha perdido el margen de error y es quien tiene el más difícil fixture de los 3 que están arriba.
La siguiente fecha ante Monserrat, a las 11 a.m